Los miedos infantiles son normales y acompañan a los niños a lo largo de su infancia para enseñarles a adaptarse al medio en el que vivirán como adultos.
El miedo es un mecanismo natural de defensa que hace que nuestro bebé aprenda qué cosas puede hacer y qué cosas son peligrosas. Se desarrolla a partir de los seis meses. Aparecerá las primeras veces en forma de miedo a caerse o a quedarse solo.
Cuando el miedo no tiene un motivo o justificación lógicos, hablamos de fobia. La ansiedad suele estar presente en la aparición de las fobias, por lo que un ambiente sano y equilibrado ayudará al niño a superar las diferentes etapas del miedo sin dificultad.
El miedo a la oscuridad, a la tormenta, a quedarse solo, son miedos infantiles comunes que desaparecerán con la llegada de la adolescencia.
Otros miedos infantiles son específicos de cada niño y suelen responder a una mala experiencia. Monstruos, fantasmas y demás entes oscuros serán frecuentes en la primera infancia. Estos miedos se harán más reales y concretos y tendrán más que ver con el daño físico y la muerte.
Durante la preadolescencia, el miedo al fracaso o al rechazo son los más frecuentes. Enseñarles a enfrentarse al miedo de manera racional y sin presión los ayudará a superar esta etapa de manera sana.
El miedo, como el dolor y la ira, no es más que un sentimiento. Para ayudar a nuestros hijos a superar los miedos infantiles debemos enseñarles a reconocerlos. Así, sabrá identificarlos y manejarlos para desenvolverse mejor ante un peligro real:
- Conocer la causa del miedo (la tormenta, un perro).
- Calibrar sus consecuencias (los rayos, puede morderme).
- Protegerse del peligro (estamos a salvo en casa, estoy con mamá).
- El peligro ya ha desaparecido o no me afecta (la tormenta está lejos, el perro está sujeto).
Nuestra actitud también es muy importante para ayudarlos a superarlos. Debemos apoyarlos e incentivarlos. Es mucho más efectivo que regañarlos, castigarlos u obligarlos. Los miedos infantiles ayudan a tu hijo a prepararse para el mundo real. Su capacidad para dominarlos será crucial en su vida de adulto.