Todas conocemos la desagradable sensación que se siente al encontrar una mancha en la ropa cuando estás planchando. Algunas manchas son mucho más persistentes que otras y, después de todo el proceso de lavado, continúan en las prendas, por lo que será más difícil que desaparezcan. Por eso, es tan importante saber cómo quitar las manchas de la ropa antes hacer la colada.
Lo más usual es que la ropa salga limpia de la lavadora y que estos desagradables incidentes ocurran sólo de vez en cuando. Los detergentes suelen incluir elementos desincrustantes con los que desaparecen la mayoría de las manchas.
Sin embargo, hay ciertas manchas de las que cuesta muchísimo más trabajo deshacerse, y que, tras un proceso de lavado con detergente, se incrustan aún más, con lo que su eliminación se convierte casi en imposible.
En general, todas las manchas deben tratarse en el momento, ya que si se resecan nos costará más trabajo desincrustarlas del tejido:
- No frotes la mancha, para evitar que el tejido se deteriore; es mejor que trates de absorberla.
- No uses agua caliente o la mancha se fijará al tejido.
- Las prendas blancas pueden lavarse con agua caliente y lejía, si las instrucciones de lavado lo permiten.
- Si estás fuera de casa y no llevas un spray quitamanchas, puedes probar con un poco de tónica o gaseosa, ya que son muy eficaces contra la mayoría de las manchas difíciles.
- Limpia las manchas en movimientos circulares y hacia el interior para que no se expanda.
Las manchas difíciles deben tratarse antes de meterlas en la lavadora, y no todas se limpian igual. Estos son algunos trucos para limpiar manchas difíciles de tu ropa:
Manchas de tinta
La mayoría de las manchas de tinta desaparecen al aplicar un poco de leche a la mancha. Si no funciona, podemos aplicar alcohol o quitaesmaltes, pero es mejor hacerlo antes sobre una parte interior para ver cómo reacciona antes de aplicarlo sobre la mancha, ya que pueden alterar los colores de ciertos tejidos.
Manchas de sangre
Lo mejor para eliminar las manchas de sangre es lavar con agua fría y detergente en el momento. Si la sangre se ha resecado podemos lavar la mancha aplicando agua oxigenada y agua fría, enjuagar y lavar normalmente.
Manchas de vino
Prueba a frotar con un poco de amoníaco antes de lavarla normalmente. Si la mancha de vino se ha resecado deberías sumergirla en leche tibia hasta que desaparezca.
Manchas de grasa
Aplica un poco de detergente antigrasa, como lavavajillas, y aclara la mancha. También puedes cubrir con polvos de talco, muy útil para absorber las manchas de grasa en tejidos difíciles de lavar, vaqueros, zapatos de ante o tela. Cepilla la mancha cuando esté seca para eliminar el talco.
Manchas de maquillaje
Las manchas de maquillaje saldrán fácilmente con un poco de detergente líquido, pero el esmalte de uñas y la barra de labios suelen resistirse más.
Para el esmalte lo mejor es usar acetona para retirar después con un poco de aguarrás (úsalos con cuidado y en pequeñas cantidades).
Para la barra de labios deberás lavar la mancha con un poco de amoníaco o alcohol de 96º antes de meterla en la lavadora.
Manchas de fruta
Trata la mancha en el momento con un chorro de agua oxigenada. Si la mancha de fruta ya se ha resacado prueba a limpiarla con un trapo empapado en amoníaco y lávala después con normalidad.
Manchas de óxido
En prendas blancas puedes aplicar un poco de jugo de limón sobre las manchas y lavar luego con lejía. Si las prendas son de color es mejor preparar una pasta de bicarbonato y limón para poder aplicarla sobre la mancha de óxido, dejar actuar durante una hora más o menos, retirar y lavar normalmente con detergente.
Manchas de moho
Desaparecerán si remojas la ropa en leche durante un par de horas. También puedes aplicar sobre las manchas de moho una pasta de bicarbonato y vinagre, déjala actuar, retírala y lávala con normalidad.
Ahora que ya sabes cómo eliminar el moho de la ropa y las manchas más difíciles, no habrá suciedad que se te resista. Mantén tu ropa como el primer día tratando las manchas en el momento y utilizando estos trucos para limpiarlas.
