Si quieres convertir la hora de la comida en un momento placentero y agradable, nada mejor que nuestras sugerencias de comida divertida para niños. Eso sí, sin renunciar a las recetas saludables que más les ayudan a crecer.
Enseñar a los niños a comer de todo es imprescindible para que tengan una dieta sana y, sobre todo, variada. Para lograrlo, nada mejor que convertir tus recetas saludables de siempre en comida divertida para niños.
El momento de la comida dejará de ser un suplicio, y tendrás muchas más probabilidades de éxito a la hora introducir alimentos nuevos o poco atractivos a la vista.
La verdura es fundamental
En sopas y caldos, en guarnición, en pasteles fríos, en ensalada..., las verduras son fundamentales en la dieta infantil, aunque estén muy lejos de ser sus favoritas.
Por eso, lo mejor es preparar con ellas recetas fáciles y aprovechar sus colores y formas para crear comida divertida para niños que les ayude a acostumbrarse a sus sabores.
Para servir las verduras crudas, mucho más nutritivas que cocinadas, prueba a utilizar salsas frescas como la de yogur, o la de crema agria.
Puedes ponerlas como parte de la decoración: a los niños les encantarán y a ti te resultará mucho más fácil que se acaben todas las verduras del plato.
El desayuno es la comida más importante del día, y si además se convierte en un momento divertido y alegre, no cabe duda de que mantendrán esta costumbre durante toda su vida.
Aprovecha el desayuno para introducir nuevos alimentos y combinarlos con otros fundamentales en una dieta sana y saludable, como los huevos, los cereales, los lácteos y la fruta.Olvídate de las clásicas tostadas y anímate con estas hermosas flores que son, en realidad, unos deliciosos sándwiches de queso y zanahoria.
Las barritas de cereales, que puedes preparar tú misma en casa, son fáciles de cortar y decorar, como estos corazones o este simpático carrito.
Los quesitos, una manera fantástica de que los niños le cojan el gusto a otros lácteos, además de la leche y los yogures, son muy fáciles de decorar: mariquitas, tulipanes, flores, animales... Todo lo que se os ocurra está en los tutoriales de Cute food for kids.
Para el queso en lonchas, no hay presentación más divertida que estas pequeñas escobas hechas con barritas de pan salado.
La fruta es muy importante en la dieta de los niños, y es perfecta para preparar comida fácil y rápida además de muy sabrosa y divertida.
Las fresas suelen ser una de sus frutas preferidas, así que aprovecha la temporada para servirlas en batidos, brochetas, ensaladas de frutas y, por supuesto, bañadas en chocolate.
Para preparar éstas, tan sólo tienes que derretir un poco de chocolate en el microondas y dejar que los niños los decoren a su gusto.
Haz lo mismo con otras frutas que les gusten menos, como estos simpáticos fantasmas de plátano, también cubiertos de chocolate blanco.
A tus hijos ya no les costará trabajo terminarse la manzana si las cortas con formas tan originales como este misterioso búho o este simpático cangrejo.
Mi amiga la fiambrera
Llevarse la comida en una fiambrera no tiene por qué ser sinónimo de comida aburrida.En nuestro país, esta costumbre es relativamente nueva, pero sólo tienes que echar un vistazo a la comida que los niños japoneses se llevan al cole para darte cuenta de que, con un poco de imaginación, tú también podrás preparar recetas fáciles de comida divertida para niños.
Escoge recetas saludables y que aguanten bien hasta la hora de comer, como ensaladas, pasta, arroz, pollo a la plancha, sándwiches, fruta...
No olvides las legumbres, especialmente en épocas de frío, que son fáciles de calentar en el microondas.
Para la decoración, te vendrán bien estos consejos:
- Utiliza pequeños recipientes para separar la comida, como moldes de silicona de magdalenas, o fiambreras más pequeñas.
- Utiliza ingredientes variados. Con distintas texturas y colores. Eso te ayudará a darle un toque divertido a la comida cada día.
- Los moldes y cortadores te serán muy útiles para dar formas divertidas al pan, el fiambre y la fruta. Combínalos entre sí para crear nuevas formas e imitar a sus personajes favoritos.
- Emplea utensilios que te ayuden a dar vida a tus recetas saludables: brochetas, palas de helados, bastoncitos de pan, pretzels, galletas saladas, biberones para salsas, moldes de plástico, pepitas de chocolate, decoración de azúcar...
- Para los aliños y las salsas lo mejor es enviarlas en una bolsita de plástico limpia y anudada. Así tu pequeño podrá añadirla a su comida con sólo agujerear la bolsita.
- Pon la fiambrera dentro de una bolsa térmica de merienda: mantienen la comida a la temperatura perfecta y son muy fáciles de limpiar.
A los niños les cuesta trabajo probar cosas nuevas, y los alimentos poco sabrosos les resultan aburridos. Para que tus recetas saludables les resulten más atractivas, prueba nuestras sugerencias de comida divertida para niños y prepárate para ver los platos vacíos.