Para ir de compras, de paseo, dar el pecho, ir de viaje, al campo o a la playa: el modo más práctico y ligero de llevar contigo a tu bebé es el portabebés. A él le encantará acompañar todos tus movimientos y a ti te sorprenderá la cantidad de cosas que podréis hacer juntos.
Llevar a tu bebé en brazos es el modo más natural y satisfactorio de transportar a tu hijo. Sentir el contacto y el calor de tu cuerpo mientras camináis hace que tu bebé se sienta tan abrigado y protegido como cuando aún estaba en tu útero.
El portabebés te permite llevar a tu bebé en brazos mientras disfrutas de una gran libertad de movimientos. Podrás llevar las bolsas de la compra en tus manos, empujar el carrito del súper, o coger tu móvil del bolso, y todo ello con el bebé seguro y bien sujeto.
El portabebés sostiene al bebé por ti, repartiendo su peso de forma equilibrada y evitando que sufras dolor de espalda, hombros y brazos mientras lo transportas. Además, favorece la posición más adecuada para que su columna, fémur y caderas se desarrollen correctamente.
Es recomendable que pruebes con tu bebé cuál es el portabebés que mejor se adapta a tus necesidades o preferencias. No todos los portabebés son iguales, y dispones de muchos tipos diferentes en el mercado:
- Bandolera portabebés: de forma asimétrica y ajustable, es muy cómoda para la lactancia materna, aunque es mejor combinar su uso con el del pañuelo portabebés.
- Foulard portabebés: se trata de una pieza de tela alargada que se ata bajo la cadera del bebé, y es el método más recomendable para su postura y desarrollo. Tanto si el pañuelo portabebés es elástico como si no, puedes usarlo desde el nacimiento hasta los cuatro o cinco años de edad.
- Mochila portabebés: muy cómodas y funcionales, son ergonómicas, fáciles de poner y pueden usarse a partir de los seis meses.
Las mamás aventureras podrán llevar consigo a su bebé a sus travesías con el portabebés mochila de montaña, especialmente diseñado para que el bebé disfrute con sus padres del deporte y la naturaleza. Y si lo tuyo es la bici, el portabebés para bicicleta te encantará: puedes fijarlo tras el sillín, aunque algunos modelos se colocan tras el manillar.
Puedes usar el portabebés en cualquier momento, tanto si estás haciendo las tareas del hogar como si caminas por la calle o incluso cuando estás haciendo deporte. El bebé estará mucho más feliz y receptivo, llorará menos y a ti te resultará más fácil alimentarlo y atenderlo.
